Aunque puede que tengáis alguna duda al respecto, lo cierto es que comprar electrodomésticos de segunda mano puede ser una buena opción. Todo va a depender del tipo de electrodoméstico, del uso que le vayamos a dar y, obviamente, del precio al que lo vayamos a comprar.
La decisión entre optar entre un electrodoméstico nuevo o de segunda mano no tiene por qué resultar complicada si seguís las pautas y recomendaciones que os vamos a dar en este artículo.
Obviamente, lo primero que tenemos que hacer antes de comprar un electrodoméstico de segunda mano es comprobar los precios de un equipo nuevo similar al que queremos comprar. Tenemos que tener en cuenta que probablemente ya no encontremos el mismo modelo que queremos comprar de segunda mano, ya que en cuestión de electrónica los productos evolucionan muy deprisa. La diferencia de precio debe suponernos, como mínimo, un ahorro del cincuenta por ciento.
Un tipo de producto que claramente recomendamos comprar de segunda mano son los accesorios de determinados electrodomésticos, como pueden ser baterías, cargadores de móviles, fuentes de alimentación de ordenadores, discos duros externos, etcétera. Por otro lado, si nos centramos en las consolas de videojuegos, mandos adicionales o los propios juegos, pueden comprarse perfectamente de segunda mano una vez que nos demuestren que funcionan correctamente.
Lo que no es recomendable comprar de segunda mano son los pequeños electrodomésticos cuya utilización esté relacionada con la higiene personal, como pueden ser máquinas de afeitar, depiladoras, aparatos de masaje, cepillos eléctricos, aparatos para cortar el pelo, etcétera. Tampoco aconsejamos que se compren de segunda mano pequeños electrodomésticos que se utilicen en la cocina, primero porque el precio de un producto nuevo de este tipo no es muy elevado y segundo porque no resulta muy higiénico.
Sí que puede resultar recomendable y muy económico comprar de segunda electrodomésticos relacionados con la electrónica como impresoras, monitores, reproductores multimedia, grabadores multimedia, televisores o equipos de música.
Si decidimos comprar un gran electrodoméstico de segunda mano, deberemos estar seguros de que se encuentra en buenas condiciones, ya que en la compraventa entre particulares no se suele ofrecer ninguna garantía. En estos casos puede ser recomendable realizar la compra en una tienda de electrodomésticos de segunda mano que nos ofrezca, al menos, una garantía de seis meses. Este tiempo es más que suficiente para comprobar que la lavadora, el frigorífico o el lavaplatos que hemos comprado funciona de forma correcta.
Por otro lado, conviene saber que las tiendas de segunda mano de electrodomésticos tienen unos márgenes bastante elevados con respecto a precio al que compraron el producto de segunda mano que tienen en venta, por ello suele ser interesante para el bolsillo realizar este tipo de adquisiciones entre particulares. Para ello resulta conveniente acudir a portales de compraventa de productos de segunda mano.
Esperamos que nuestros consejos os hayan sido de utilidad y que si se os ocurre cualquier otra recomendación, no dudéis de indicarla en los comentarios.
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